lunes, 19 de agosto de 2013

Comprar libros de Rubén Pérez Trujillano

La forma de adquirir alguno de mis libros es muy sencilla.

  1. Mándame un correo electrónico a la dirección pereztrujillano@gmail.com con el asunto "Compra". En el correo debes indicar tu nombre completo, tu dirección postal y el título o títulos que deseas. 
  2. Una vez que lo haya recibido, te confirmaré la disponibilidad del título. 
  3. Entonces deberás realizar un ingreso por el importe del libro más 3 € de gastos de envío, en una cuenta corriente que te facilitaré.
  4. Una vez realizado el ingreso, te enviaré el libro por correo ordinario
  5. Si te interesa, el ejemplar puede ir dedicado a quien desees.
  6. Para cualquier duda no dudes en ponerte en contacto a través de la misma dirección: pereztrujillano@gmail.com. 


L   I   B   R   O   S


  •   Rubén Pérez Trujillano (2008): Quien pueda decir adiós, Aula de Literatura José Cadalso, nº 141, San Roque (Cádiz). 

Prólogo de Juan Gómez Macías.
25 páginas. 
Depósito Legal: CA-609/94.

* Este cuadernillo se repartió gratuitamente con motivo de mi recital en el Aula de Literatura José Cadalso, por lo que no está en venta. Si tienes alguna duda no dudes en mandar un email.

  • Jesús Aguado (ed.) (2009): Lo que ha quedado del naranjo. Palestina en el corazón, Colección Puerta del Mar, Diputación de Málaga, Málaga.
176 páginas.
Depósito Legal: MA 1358/2009
ISBN: 978-84-7785-830-0

Antología multidisciplinar elaborada por el poeta Jesús Aguado, que contiene un poema de Rubén Pérez Trujillano (página 127).

* Puntos de venta (entre otros): Diputación de Málaga, Babel, Picasso, Casa del Libro...





Antonio Pérez Girón / Rubén Pérez Trujillano (2010): Un guerrillero andaluz (Francisco López Herrera), Colección Los Pasos Encontrados, Fundación Municipal de Cultura Luis Ortega Brú, San Roque (Cádiz).

85 páginas. 
Depósito Legal: CA 193/2010
ISBN: 978-84-936474-6-9

Biografía del guerrillero antifranquista Francisco López Herrera, Requeté (1922-2009), en la que se relata su participación en el maquis que operó en la zona del Campo de Gibraltar, Cádiz y Málaga, así como su desarrollo. Incluye una recopilación de coplas y cantes flamencos interpretados por los guerrilleros.
- Historia local y comarcal, Historia de la guerrilla -

5 euros



  •  Rubén Pérez Trujillano (2013): La tierra en abril, Colección Abalorios, DMC Luis Ortega Brú, San Roque (Cádiz).

Prólogo de Juan Gómez Macías.
101 páginas.
Depósito Legal: CA 443/2012.
ISBN: 978-84-936474-8-3.


"Es un libro de poemas de amor, de la alegría de vivir, de asombro, de preguntas, de temores, de admiración y de gozo. Son poemas escritos con la conciencia de las sombras, el deseo insoslayable de la luz y la presencia inquietante del espejo. El suyo, el que le muestra constantemente la anatomía del milagro de vivir y sus prodigios" (Juan Gómez Macías).
- Poesía- 
8 euros





  • Antonio Pérez Girón / Rubén Pérez Trujillano (2013): San Roque, la burguesía de izquierda durante la II República, Ende, A Coruña.
138 páginas.
Depósito Legal: C 436/2013.
ISBN: 978-84-941083-2-7.

 El compromiso de la burguesía de izquierdas fue claro durante la II República. Apostando por las reformas sociales y democráticas que modernizaran la nación, hubo de enfrentar enormes dificultades en un período donde los radicalismos trataban de imponer sus ideas. Ésta es la historia de los republicanos de izquierdas en San Roque durante el período 1900-1939, con especial énfasis en la etapa republicana.
- Historia local y comarcal -
10 euros


Soberanía en la Andalucía del siglo XIX. Constitución de Antequera y andalucismo histórico
  • Rubén Pérez Trujillano (2013): Soberanía en la Andalucía del siglo XIX. Constitución de Antequera y andalucismo histórico, Atrapasueños, Sevilla.
268 páginas.
ISBN: 978-84-15674-26-9.

La Constitución de Antequera (1883) marcó un hito en la historia de Andalucía. Se fraguó en las teorías de revolucionarios como Proudhon y Pi y Margall, pero también en otros autores y en reivindicaciones que hundían sus raíces en el Sur. Declaró la soberanía del pueblo andaluz y consagró una serie de derechos -tanto individuales como colectivos- que la sitúan en una posición excepcional y avanzada dentro del panorama constitucional de la época. Todavía hoy, algunos de sus preceptos destilan lo más granado del movimiento republicano ibérico, que vieron nacer al andalucismo histórico.
- Historia de Andalucía, Historia del Derecho, Historia del republicanismo- 

viernes, 9 de agosto de 2013

"Carmen". Tres sonetos de Alberto Álvarez de Cienfuegos


A modo de introducción

Reproduzco algunos sonetos en buena medida ignorados del poeta Alberto Álvarez de Cienfuegos (1885-1957). Fueron publicados en la revista Nuevo Mundo (nº 1258, 22 de febrero de 1918). En internet hay distintas recopilaciones de poemas (aquí).

En Wikipedia hay una entrada fiable sobre la vida y la obra del poeta que nos ocupa, por lo que nos limitaremos a resaltar algunos aspectos. Su familia, ilustrada y acomodada, era de Granada, aunque nació en Martos (Jaén) y murió en Puertollano (Ciudad Real). No obstante, estos datos son meramente anecdóticos, ya que pasó la mayor parte de su vida en Granada. Allí estudió Derecho y fundó la tertulia literaria “La Cuerda Granadina”, frecuentada por Pedro Antonio de Alarcón y otros artistas.

A rasgos generales, puede decirse que en su obra hay cierto “costumbrismo regionalista o local”  (según la reseña bibliográfica que José Carlos Rosales realiza de él en la antología Memoria poética de la Alhambra, Sevilla, 2011). Aunque también cultivó el teatro e incluso el cine, cabe citar sus poemarios: Andantes (1910), Generalife (1916), Los dos Alcázares. Alhambra y Generalife (1916), Lirismo andaluz (1925) y La vega, la ciudad y la sierra (1930). También aportó letras flamencas a cantaores del momento.

Apuntes sobre su obra poética

En mi opinión, Alberto Álvarez de Cienfuegos presenta una poesía fundamentalmente neopopularista, que bebe más de los cancioneros de los siglos XVI-XVII, Gil Vicente y Lope de Vega, que de la producción artística genuinamente popular (folklore, cante flamenco, copla andaluza, etc. sin exclusión de la tauromaquia). El eslabón que une lo popular con lo culto lo extrae de un modernismo que, en efecto, da los últimos coletazos por aquellas fechas. Tal vena culta dentro del neopopularismo, lo acerca más a Rafael Alberti que a su amigo Federico García Lorca. Así lo veremos en los siguientes sonetos. En cualquier caso, sobra decir que tales notas características tienen la virtud de alejar a Álvarez de Cienfuegos de los poetas baratos propios de una corriente de carácter vernáculo (una poesía tabernera y de panderetas), dentro de la que sin duda puede enmarcarse a José María Pemán.

En cuanto al componente andalucista de su obra, deja entrever con meridiana claridad la tensión entre lo local (ni siquiera provincial) y lo propiamente regional/nacional, que es constitutiva, según J. A. González Alcantud, de la realidad nacional andaluza (véase su Deseo y negación de Andalucía, Granada, 2004).

Por último, y más en relación con los presentes sonetos, vale la pena hacer notar la puesta en práctica de un yo ficticio, dramatizado, en una narración del poema que aparece siempre en busca de la verosimilitud pero no de la biografía. Un caso de poesía neopopularista, modernista, figurativa y, como vemos, "de la experiencia" (tal y como se viene entendido ésta última categoría en el panorama lírico español contemporáneo).



C__A__R__M__E__N

I.


Córdoba, corazón de Andalucía
que late con la sangre de sus vinos,
puso en tus ojos la melancolía
profunda de los trágicos destinos;

de los negros destinos pasionales
de una raza fundida en los crisoles
que bruñeron artistas orientales
con el sol de los cielos españoles.

Ojos de sombras y de fatalismos,
pupilas insondables como abismos
que tienen la poesía indefinida

del rayo de luna que nos besa,
mientras soñamos, junto a la florida
ventana de una calle cordobesa.

 

II.

Desde el comienzo presentí el fracaso.
Y al vestirme de luces aquel día,
sudario funeral me parecía
mi chaquetilla de crujiente raso.

Tú estabas en la plaza. Tu sombrío
semblante delataba tus enojos.
No sé lo que sentí. Cerré los ojos;
cité con rabia, resistí con brío,

y, a tiempo que la fiera me alcanzaba,
le hundió mi brazo, hasta la cruz, la espada.
Y, así, al rodar sobre la arena, inerte,

me luce por feliz, porque sabía
que tú llorabas con placer mi muerte
con tal de no llorar mi cobardía.

 

III.

Danzabas bajo el cielo cordobés.
Un clavel que nimbaba tus hechizos
se desprendió de tus revueltos rizos,
rozó tus sienes y cayó a mis pies.

Creyéndolo divisa de tu amor
quise cogerlo, de mi mente ufano.
Mas mi mano topó con otra mano
que, brusca, quiso arrebatar mi flor.

Contemplé a mi rival, ciego de rabia,
como quien lanza un reto a quien le agravia  
y –¡ven por él!– gritó mi fiero enojo.

–¡Disputa, si te atreves, mi derecho!–
Y, al acercarse, mi cuchillo un rojo
clavel de sangre le prendió en el pecho.


  • Alberto A. de Cienfuegos: "Carmen", en Nuevo Mundo, nº 1258, 22 de febrero de 1918, pág. 10.